viernes, 3 de agosto de 2012

Los portadores de la antorcha





Los portadores de la antorcha es una escultura que se encuentra en la Ciudad Universitaria de Madrid. Es obra de la estadounidense Anna Hyatt (1876-1973), esposa del hispanista e hispanófilo estadounidense Archer Milton Huntington. La realizó entre los años 1950 y 1954 en homenaje, según dijo, a la herencia de la civilización occidental. Anna Hyatt quiso representar en este grupo escultórico el traspaso de conocimiento de una generación a la siguiente. La escultora dejo constancia en sus diarios que cuando la esculpió tenía en mente el heroísmo de los españoles que durante siglos habían luchado por sus ideales y que desde la Ciudad Universitaria podrían liderar el mundo.

Ni me acuerdo de la edad que tenía la primera vez que la vi. Lo que sí recuerdo es que fue de casualidad. Estudié Historia y Derecho en la Universidad Autónoma, donde ahora estudio Filosofía. Mis paseos por la Universidad Complutense fueron siempre muy escasos, y menos por la plaza donde se encuentra situada la escultura, frente a las facultades de Medicina y Farmacia.



También recuerdo que desde el primer momento que la contemplé me impresionó. Observé con detenimiento al joven que monta a caballo, un hombre fuerte y seguro de sí mismo que tiene toda la vida por delante. Se inclina levemente para recoger la antorcha que le brinda un anciano, abatido, exhausto, miembro de una generación anterior que se libera con la entrega y traspasa con ello la responsabilidad a la generación posterior.



También recuerdo que entre los dos roles que presenta la escultura me vi identificado, como no podía ser de otra forma, con el hombre joven que inicia su andadura con la seguridad de que su generación alcanzará cotas superiores a la generación sustituida.

Hace unos días volví a aquel lugar a tomar unas fotos y ¿qué descubrí?, descubrí que mi mirada se dirigía más bien al anciano que extiende su brazo y ofrece la antorcha. Y no lo hice ni con nostalgia ni pesadumbre, tal vez con algo de decepción, pero con serenidad, asumiendo la responsabilidad del tiempo que estuvo en mi mano, recordando las derrotas cosechadas, pero también recordando la decisión e ilusión con las que afronté todos los retos, peleas, batallas, celebraciones…



Tal vez alguien, algún día, analice los errores y aciertos de mi generación y sea capaz de desvelar por qué no fuimos capaces de hacer las cosas mejor, dónde actuamos como cobardes, cuándo lo hicimos con miedo, en qué ocasiones supimos superarlo y en cuáles marcó nuestra conducta y fuimos sometidos.

Por mi parte no pido ni clemencia ni perdón, solo pido que antes de juzgarnos piense en la escultura de Anna Hyatt, tome la antorcha y afronte con valentía el riesgo que le tiene reservado el futuro. Muchos años después, cuando se vea tirado en el suelo y utilice sus últimas fuerzas para extender su brazo y entregar la antorcha al joven que se la reclame, entonces, justo entonces, estará en disposición de juzgarnos.



Espero que en ese momento no le tiemble la mano y sea implacable. Estoy seguro que ya habrá aprendido cómo hacerlo.


 


Madrid, tres de agosto de dos mil doce.


NOTAS.

(1) El grupo escultórico Los portadores de la antorcha fue inaugurada el 15 de mayo de 1955. En ese año nací yo. 

La escultura que se encuentra en la Ciudad Universitaria de Madrid fue fundida en aluminio. Existen tres copias en bronce. Dos se encuentran en Estados Unidos, una en la Universidad de Carolina del Sur y la otra en el Discovery Museum de Bridgeport (Connecticut). La tercera se encuentra en Valencia.

En el pedestal figura, tanto en inglés como en español, una inscripción escrita por José María Souvirón  que Archer Huntington recogió en su libro de poemas The Torch Bearers (Los portadores de la antorcha). Es la siguiente:

EL HOMBRE LLEVA LA SAGRADA ANTORCHA
DE LA FIDELIDAD POR LAS CANDENTES
ARENAS DEL DESIERTO DE LOS TIEMPOS
LA MUJER LLEVA LA MATERNIDAD
COMO ANTORCHA SUBLIME EN SU CAMINO
CON AMBAS LUCES LLEVAN A SU TÉRMINO
LA INCANSABLE TAREA DE LAS ALMAS
HASTA LA ETERNA PUERTA DE LOS CIELOS
ANTE EL GOZO DE DIOS ARREBATADOS.

2. FOTOS. Es mi deseo que las fotos que se reproducen en este artículo de ‘Los portadores de la antorcha’ sean de dominio público. Por esa razón renuncio a los derechos que pueda tener sobre ellas y autorizo su uso y reproducción.

Anna Hyatt Huntington
 Fuente: http://es.wikipedia.org/wiki/Anna_Hyatt_Huntington, 3 de agosto de 2012